En muchas ocasiones el desconocimiento de las posibilidades de las cámaras réflex hace que únicamente se utilicen los programas automáticos, perdiendo muchas posibilidades creativas.
Uno de los ajustes semiautomáticos disponible en la mayoría de cámaras réflex es el del ajuste de apertura o diafragma. En la mayoría de las cámaras, viene indicado por una letra "A" (del inglés Aperture), aunque hay excepciones - Canon, por ejemplo, lo indica con "Av" (del inglés Aperture value).
Este ajuste fija la apertura del diafragma al tomar la fotografía. Este diafragma es una cortina circular que deja pasar más o menos luz al sensor, y sus valores hacen referencia a la fracción de luz que pasa, con la referencia de una lente ideal. La cámara calculará el tiempo de exposición necesario para que la fotografía sea correcta.
Los valores tradicionales de diafragma eran
1 - 1.4 - 2 - 2.8 - 4 - 5.6 - 8 - 11 - 16 - 22...
Hoy en día, con el control electrónico, podemos encontrar valores intermedios. Valores más bajos dejan pasar más luz.
Conceptos básicos
A partir de lo indicado arriba, se deducen un par de conclusiones claras:
El hecho de interponer un objeto (el diafragma) en la trayectoria de la luz, tiene efectos físicos en cómo se transmite la imagen a través del objetivo:
Este ajuste fija la apertura del diafragma al tomar la fotografía. Este diafragma es una cortina circular que deja pasar más o menos luz al sensor, y sus valores hacen referencia a la fracción de luz que pasa, con la referencia de una lente ideal. La cámara calculará el tiempo de exposición necesario para que la fotografía sea correcta.
Los valores tradicionales de diafragma eran
1 - 1.4 - 2 - 2.8 - 4 - 5.6 - 8 - 11 - 16 - 22...
Hoy en día, con el control electrónico, podemos encontrar valores intermedios. Valores más bajos dejan pasar más luz.
Conceptos básicos
A partir de lo indicado arriba, se deducen un par de conclusiones claras:
- Si cerramos el diafragma, para que nos entre la misma cantidad de luz se debe tener una exposición más larga, y viceversa.
- Para fotografías con poca luz se debe ajustar el diafragma a valores bajos (mayor apertura). Con mucha luz, hay que cerrar el diafragma.
El hecho de interponer un objeto (el diafragma) en la trayectoria de la luz, tiene efectos físicos en cómo se transmite la imagen a través del objetivo:
- Una apertura pequeña (16 o más) produce imágenes más enfocadas tanto delante como detrás del plano de enfoque (objeto principal fotografiado). Es la opción ideal para fotografía de paisajes (pero necesita tiempos de exposición más largos, quizá sea necesario un trípode).
- Una apertura pequeña (4 o menos) únicamente enfocará cerca del objeto principal, desenfocando el fondo (y el primer plano, si lo hay). Será la opción óptima para fotografía de retratos.
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